Recuerdo haber leído sobre un estudio sobre este tema probado en ratones de laboratorio. Creo que el tema no ha salido en el foro, al menos no sale en la búsqueda.
El estudio consistia en administrar cantidades pequeñas de humo de tabaco a ratones, de forma periódica y durante unos meses. El resultado fue que una parte importante de ratones perdio pelo, entre otros efectos que causó el tabaco. No he encontrado información especifica sobre el estudio, pero si
esta página donde lo comentan.
ASOCIACIÓN ENTRE TABACO Y CALVICIE: OTRA RAZÓN MÁS PARA DEJAR DE FUMAR
23.05.06
El Dr Trüeb, reconocido especialista mundial en alopecia, publica en una importante revista científica la posible asociación del tabaco con la calvicie. Aunque sabemos que la causa más importante de la calvicie común (alopecia androgenética) es la influencia hormonal en las personas genéticamente predispuestas, quedan por conocer otros factores que explican los casos en los que la calvicie no se puede explicar por estos motivos. Aunque no existe ningún estudio definitivo que lo demuestre totalmente, encontramos algunos artículos publicados que reconocen el hábito de fumar como un factor relacionado con la pérdida de cabello.
Además de ser la conducta evitable más importante relacionada con la pérdida de salud y mortalidad en la población general, el tabaco se ha asociado con numerosos efectos secundarios a nivel de piel y cabello. Entre ellos son muy bien conocidos el envejecimiento prematuro de la piel, la aparición de arrugas, la aparición de canas, la atrofia de la piel y la alteración de la cicatrización de las heridas. Menos conocida es la asociación con la pérdida de cabello, a pesar de haber sido publicado en varias ocasiones.
Ya en el año 1985, el Dr Model describió los cambios en la piel de las personas fumadoras agrupándolos en la llamada “cara del fumador”. Esta incluía una o más de las siguientes características: 1) finas arrugas perpendiculares en labios superior e inferior o en ángulos de los párpados (típicas “patas de gallo”), arrugas profundas sobre mejillas o mandíbula; 2) aspectos faciales demacrados con prominencia de los contornos óseos y en algunas ocasiones asociados a una piel rugosa o similar al cuero; 3) apariencia atrófica y de color grisáceo de la piel; y 4) complexión rojiza o púrpura. El Dr Model encontró que la “cara de fumador” se observaba en el 46 % de los fumadores, además de en un 8 % de exfumadores, mientras que no la observó en ningún no fumador. El hecho de que no todos los fumadores presentaran estas alteraciones indica que los factores genéticos siguen siendo determinantes.
Más recientemente, un estudio observacional realizado por el Dr Mosley en 1996, ha relacionado el hábito de fumar con la aparición de canas prematuras en hombres y en mujeres, así como con la calvicie en hombres. Como la calvicie es mucho menos frecuente en las mujeres, en este estudio no se pudo valorar la relación entre tabaco y calvicie femenina.
Los mecanismos por los que el tabaco puede acelerar la caída de cabello no han sido estudiados en profundidad, pero se piensa que podrían ser similares a los que provocan las arrugas: alteración de la microcirculación sanguínea en la piel del cuero cabelludo, isquemia local, presencia de toxinas que podrían dañar el ADN del folículo piloso, aumento de radicales libres, alteración del equilibrio proteasas/antiproteasas con inflamación y fibrosis perifolicular, estado hipoestrogénico relativo a nivel local, etc.
En un experimento reciente realizado en ratones, se ha conseguido demostrar que estos animales desarrollaban alopecia al ser expuestos al humo del tabaco.
El hecho de que la pérdida de cabello asociada al humo del tabaco sea del tipo androgenética indica de nuevo la contribución de los factores genéticos. Es evidente por otro lado que las variaciones entre individuos también dependerán de sus patrones de conducta, y que los pacientes expuestos al tabaco también están expuestos a otros factores de riesgo como podrían ser la toma de andrógenos, un exceso de luz ultravioleta o el estrés, todos ellos implicados de una manera o de otra en el desarrollo de alopecia.
Estos estudios han observado una relación entre el tabaco y la calvicie aunque no se puede establecer una relación de causa-efecto. Aunque sólo es una posibilidad, si que están bien claros y científicamente demostrados otros efectos perjudiciales y potencialmente mortales del tabaco. Se conocen alteraciones en casi todos los órganos y sistemas del cuerpo humano directamente provocados por el hábito de fumar. Por lo tanto, esta posible relación con la calvicie es un motivo más para dejar de fumar lo antes posible y quizás con esto mejoremos no solo nuestro cabello sino además nuestro estado de salud futuro y nuestra calidad de vida.
BIBLIOGRAFIA:
- R M Trüeb. Association between Smoking and Hair Loss: Another Opportunity for Health Education against Smoking? Dermatology 2003; 206:189-191.
- J G Mosley, A C C Gibbs. Premature grey hair and hair loss among smokers: a new opportunity for health education? British Medical Journal 1996; 313: 1616.
A parte, en mi caso personal puedo decir que, no se si por casualidad o no, mi caida de cabello empezó poco después de empezar a fumar, sobre los 16-17.
¿Hacemos una dejada de tabaco colectiva?
Saludos!!